Las salas de escape están de moda, y no es para menos. Son la actividad perfecta para pasar un buen rato entre amigos, compartir tiempo con la familia o celebrar un acontecimiento especial, como un cumpleaños o una despedida de soltero/a.
Nosotros, que somos muy de nuestra tierra, nos decantamos por hacer la scape room de Ámbar. Ya que íbamos de propio, que tuviera un toque aragonés, ¿no?
Y la verdad es que fue una experiencia muy divertida y agradable. No podemos contar mucho del desarrollo de la actividad por motivos obvios (¡desvelaríamos todo el contenido y romperíamos el encanto!) pero sí diremos que se trata de una actividad muy dinámica. Se pasa por diferentes ambientes y, por supuesto, todo gira en torno a la temática cervecera.
Los asistentes tienen que rescatar la fórmula de la inigualable cerveza Ámbar, ¿lo conseguiréis? ¡Nosotros sí! Aunque todo sea dicho, en el último segundo.
Para quienes estén acostumbrados a hacer otras salas de escape, y tengan buna idea preconcebida de cómo es esta actividad, un par de apuntes. Por un lado, aunque las salas de escape suelen ser, habitualmente, de unos 60 minutos, en este caso la de Ámbar es más larga y dura hasta los 75 minutos. Por otro lado, es una sala muy novedosa, con mecanismos muy innovadores que van mucho más allá de las llaves y candados. Hay que darle al coco mucho para salir con la fórmula de la cerveza.
¡Os divertiréis, seguro!